Todo lo que necesitas saber sobre la eyaculación precoz

Partiendo de la base de que las relaciones eróticas ya son un tema bastante tabú de por sí, la eyaculación precoz lo es un poco más. Y es que a nadie nos gusta que nos critiquen y culpen por algo que no podemos controlar directamente.

Sin embargo, como la buena tienda erótica que somos, no podemos dejar este tema en el olvido. Por ello, hemos decidido darle un buen repaso a la eyaculación precoz, sus causas y soluciones.

¿Qué es la eyaculación precoz?

Las casas no se empiezan por el tejado y nosotras tenemos que empezar por lo básico. La eyaculación precoz es la etiqueta que habitualmente se usa para aquella persona que está insatisfecha con sus tiempos de eyaculación. Es frecuente que el tiempo que se tarda en eyacular varíe dependiendo de factores situacionales y psicológicos, pero en los casos de eyaculación precoz el sentimiento de insatisfacción es constante.

Esta es una situación que afecta a más gente de la que se piensa. Así mismo, es una de la que no se habla tanto como se debería (muchas veces por la vergüenza que causa) y esto conlleva a desinformación y frustración.

Posibles causas de la eyaculación precoz

Las posibles causas las podríamos relacionar desde una perspectiva bio-psicológica y social, ya que hay factores biológicos y psicosociales que influyen en la percepción y en los tiempos de eyaculación. Así que vamos a analizar ambas partes de la ecuación.

Causas psicológicas

Los posibles factores psicológicos que influyen en los tiempos de eyaculación precoz pueden afectar a cualquier persona en diferentes momentos de su vida. Y es que nuestros pensamientos y creencias pueden alterar nuestra vida sexual (tanto para bien como para mal). Siendo los factores psicosociales los que suelen estar más relacionados con la disconformidad en los tiempos de eyaculación. Algunos de los factores más frecuentes son:

• Educación sexual deficiente o nula que conlleva a prácticas y pensamientos que no congenian con la realidad .

• Tener de referencia los tiempos surrealistas y coreografiados de la pornografia.

• Alteraciones emocionales predominantemente negativas.

• Presión por cumplir un determinado rendimiento sexual, ya sea propio o de la pareja. La presión social que nos han enseñado también juega un papel en este tipo de pensamientos que nos crean ansias de cumplir con lo que se espera de nosotros y nosotras. 

• Costumbres de masturbación rápida y altamente intensa que generan aprendizajes y necesidades para eyacular ante una estimulación determinada y en un tiempo determinado. También hay que tener en cuenta que muchos de estos los extraemos de la pornografia, ante la falta de una educación sexual integral adecuada.

• Los problemas de pareja también pueden desencadenar este tipo de situaciones. 

Causas biológicas

También existen factores biológicos que pueden afectar al tiempo de eyaculación, mayormente relacionados con cambios hormonales. Algunos de los más habituales pueden ser:

• Alteraciones hormonales.

• Inflamación de próstata.

• Infecciones urológicas.

• Efectos secundarios de algunos medicamentos.

Posibles remedios o soluciones para la eyaculación precoz

Por mucho que haya miles de páginas web que prometen enseñar a cómo retardar la eyaculación, no suelen ofrecer soluciones reales, si no parches temporales. Para tener una percepción realista de nuestros tiempos de eyaculación hay que valorar qué factores pueden estar influyendo en cada caso particular.

Ahora, puede parecernos que resolver esta situación no es tarea fácil, puede darnos vergüenza y que esto nos haga retrasar acudir a un profesional que nos pueda ayudar a resolver lo que nos preocupa. Pero en la mayoría de los casos, tras una evaluación de los factores que pueden estar influyendo y la aplicación de las herramientas necesarias, la solución es mucho más fácil de lo que parecía al inicio, aunque es verdad que requiere de esfuerzo tanto individual como de la pareja (si existe). Esto, como hemos comentado antes, es porque las causas son varias y complicadas. Eso sí, existen herramientas que pueden dar resultado a largo plazo, ¿por dónde empezar? 

• Acudir a una revisión en urología para descartar posibles causas biológicas. 

• Acudir a profesionales de la psicología sanitaria con formación en sexología. Este suele ser el especialista que puede acompañarte más eficazmente y en Onna tienda erótica de Toledo lo sabemos de primera mano. Llevamos colaborando con la sexóloga Lorena González desde hace más de 10 años. Con su ayuda, decenas de clientes han podido resolver sus preocupaciones y dificultades sexuales.

Consejos para ayudar a solucionar la eyaculación precoz

Queremos ofrecerte tres tips que pueden ayudarte en esta situación de parte de nuestra colaboradora sexóloga, Lorena González.

• Uno de los que suelen ser de gran utilidad es la comunicación. Transmitir nuestros pensamientos, emociones, sentimientos… En definitiva, cómo nos sentimos a nuestra pareja puede ayudar a la comprensión de la situación pudiendo facilitar afrontarla como equipo.

• Otro de los tips que nos gustaría que supieras, que es fundamental, es que tu valor como amante no depende de lo que exclusivamente ocurra con tu pene y la eyaculación. Tu eres mucho más que tu pene.

• El último consejo es que si se repite en varias ocasiones y es algo que te preocupa, no dejes pasar el tiempo. Es muy frecuente que algunas emociones nos paralicen para recurrir a un profesional como por ejemplo la vergüenza, pero cuanto más dejes pasar el tiempo la bola suele ir creciendo.

La eyaculación precoz no es el fin de la vida sexual

Recordemos que el sexo no es solo penetración y ya, si no que es un mundo muy rico y complejo que engloba infinitas practicas. Por ejemplo, puedes introducir más juegos eróticos que involucren el uso de las manos, juguetes eróticos, juegos de mesa, juegos de rol… o centrar más la atención en los labios, los senos, y demás partes sensitivas del cuerpo.

Si quieres conocer algunas ideas o experimentar sensaciones nuevas ¡no dudes en acercarte a Onna tienda erótica o revisa nuestra sex shop online!